Datos Históricos: Antes de la creación de este departamento el municipio de La Ceiba y El
Porvenir formaban parte de Colón, y el municipio de Tela era parte de Yoro, hasta que se
emitió el Dec. No. 51 para formar el Departamento de Atlántida, el 24 de febrero de 1902.
ORIGEN DE SU NOMBRE: Atlántida derivado Atlántico, Océano que baña la Costa
Norte de Honduras y que separa los continentes de Europa, África y América.
SITUACION: Está situado en la parte Norte del país, es una faja de tierra, de poca anchura
y bastante larga.
LIMITES: Al Norte, Mar de las Antillas; al Sur, Departamento de Yoro; al Este,
Departamento de Colón y parte del departamento de Yoro y al Oeste, Departamento de
Cortés.
MONTAÑAS: La Sierra Nombre de Dios, de ella se desprenden la Sierra del Tiburón y la
Sierra de Las Flores; en La Ceiba, paralela a la playa, corre la ramificación de la cordillera
de Montecillos, formando las alturas de Cabeza de Vaca, El Porvenir, Corinto, Pico de
Bonitillo, Pico de La Ceiba o El Cangrejal y Papaloteca; en El Porvenir está el Cerro
Salado, montaña de Los Indios y Cerro Bonito; en San Francisco montañas de Salado y
Jimerito.
RIOS: Río Ulúa, separa el Departamento de Atlántida y Cortés; Río Lean con sus
afluentes: el Río Texiguat, Ulúa y Jilamo, El Alao, Cangélica y Colorado; también están el
Río Danto; El Cangrejal; Bonitillo; Río de Piedras, Cuyamel y Papaloteca, El Salado, El
Zacate, El Juan López, El Bonito y Río Cuero, y sus tributarios.
El trensito equipado tiene capacidad de 30 personas sentadas
"A este animal no le gusta la publicidad", objetó el guía-ecologista mientras maniobraba el timón de la lancha con motor fuera de borda. "Además este ruido lo ahuyenta".
Estábamos en uno de los esteros del refugio de vida silvestre Cuero y Salado, reserva natural de 13,225 hectáreas de extensión situada a 17 kilómetros al oeste de la ciudad de La Ceiba, entre los municipios de El Porvenir, La Masica, San Francisco y Arizona, departamento de Atlántida.
El animal a que el guía se refería es al manatí, mamífero en vía de extinción que vive en las cálidas aguas de este esplendoroso lugar, atrapado por una infinita belleza tropical y compuesto por ríos, canales, lagunas, islas e islotes donde se viven o pasan su temporada de verano 195 especies distintas de aves y numerosas manadas de monos cara blanca, venados, olingos, pizotes, jaguares, tortugas, víboras, peces, etc.
El manatí es la especie emblemática de la Fundación Cuero y Salado, Fucsa, que se encarga de preservar la belleza natural del refugio y coordina las visitas. También llamada "vaca marina", el manatí se reproduce entre las raíces aéreas de los manglares y huye cuando detecta la frecuente presencia de humanos.
Esta es la planta procesadora de fertilizante orgánico de la Standard Fruit de Honduras en Cuero
Al sitio sólo se llega por línea férrea. La Standard Fruit de Honduras tiene allí una planta procesadora de fertilizante orgánico que saca de la pulverización de la cáscara de coco seco en dos molinos. Previo al proceso, la pulpa de la fruta es extraída y exportada en cajas a los mercados de Estados Unidos y Europa.
Hasta el sábado 21 de enero, el tren que carga la urea en sacos y el ruido del motor a diesel que mueve la planta era lo único extraño en Cuero y Salado que desentonaba con el ambiente taciturno del refugio desde hace varias décadas. Pero desde esa mañana un motocarro acondicionado para pasajeros del Ferrocarril Nacional comenzó a hacer viajes diarios al lugar desde la aldea La Unión, jurisdicción de El Porvenir, adonde se puede llegar en carro. El FCN invirtió varios miles de lempiras en la reconstrucción de la vía, como un aporte al turismo nacional.
Ese rudimentario y a la vez atractivo medio de transporte con capacidad para treinta personas permitirá, según las autoridades de Fucsa, una mayor afluencia de turistas nacionales y extranjeros.
Debido a que antes la travesía de nueve kilómetros entre La Unión y Cuero había que hacerla a pie, sólo 2,400 visitantes llegaron al refugio en 1999.
"Este trensito es lo nuevo aquí", comentó doña Juana Arzú, residente en la aldea de Cuero. "Debido a que Fucsa no permite la apertura de una carretera, por lo menos no caminaremos tanto".
La expresión de la mujer deja escapar las serias diferencias que existían años atrás entre los moradores de las comunidades de Cuero y de Salado (comunicadas sólo por canoas y lanchas) y la Fundación.
Los malos entendidos con los vecinos garífunas han sido superados, dijo José Herrero, presidente de la Junta Directiva de Fucsa. Al principio creían que veníamos a quitarles todo y cambiar su estilo de vida. Ahora se han dado cuenta que no es así, que lo único que tratamos es proteger la zona.
El sistema de transporte ferroviario fue inaugurado por el gerente del Ferrocarril Mario Quintanilla, y directivos de Fucsa encabezados por su presidente José Herrero, el director Guillermo López, y Sary Alcántara, directora de la carrera de Ecoturismo, recien abierta en el Centro Universitario Regional del Litoral Atlántico, Curla.
Desde el Mitch, las playas de Cuero y Salado están abandonadas. Los vecinos no quieren ni recoger leña
El tiempo se había detenido aquí hasta que el huracán Mitch cambió el panorama. El agua subió hasta dos metros de altura a raíz que en el refugio desembocan unos cinco ríos y riachuelos, entre ellos el Perla, Amarillo, Bonito y Cuero, cuyas crecidas dejaron amargos recuerdos a los habitantes. A esta desgracia se unió en los últimos años una enfermedad que ataca al cocotero, el "amarillamiento letal" que amenaza con dejar a la comunidad sin el único medio de sustento.
La reserva de Cuero y Salado no tiene infraestructura turística. A pesar de la cercanía del mar, nadie vende siquiera un pescado frito. En la única pulpería que existe, es más fácil encontrar cervezas que alimentos. Fucsa alquila una casa de madera sobre pilotes "para pasar la noche" para quien lo desee, pero las comodidades son mínimas.
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