Con qué azotar
La mano
El instrumento preferido para dar nalgadas,
usado a lo largo de toda la historia es ese mecanismo maravilloso, la
mano humana. Su contacto es íntimo, pero puede ser un instrumento severo
cuando lo usa alguien que sabe. Ud. está tocando al castigado, pero también
está mostrando su enojo ante su mal comportamiento.
Asegúrese de quitarse cualquier anillo que
esté usando. Si pega fuerte, los anillos pueden cortar la piel.
Hay varias posibilidades para golpear usando
la mano, cada una con sus propias sensaciones. Una es con la muñeca fija,
los dedos juntos paralelos y rígidos. Se pega desde el codo, usando el
antebrazo y la mano como una paleta.
También puede usar su mano como un látigo.
Deje la muñeca suelta y golpee con un movimiento rápido del antebrazo,
dejando que los dedos relajados golpeen como lo haría la punta de un látigo.
Ambos tipos de palmada se pueden dar con los
dedos abiertos. Abrir los dedos permite cubrir una superficie mayor, y
permite que el aire escape, reduciendo la amortiguación del golpe. Al
comienzo de un castigo, o si piensa dar sólo un par de palmadas para llamar
la atención, deja sobre la piel una marca roja atractiva e inconfundible.
Otra posibilidad es con la mano ahuecada.
Junte los dedos, cúrvelos un poco, junte la punta del pulgar a la segunda
articulación del Posiciones. Tal vez las nalgadas sean menos dolorosas, pero el
sonido es magnífico. Si abre un poco los dedos, pegará más duro y con
menos ruido.
Una técnica usada mayormente en Europa es la
de golpear para arriba, empezando con la mano a la altura de los muslos,
dando un golpe oblicuo, casi paralelo a las nalgas. Las verá temblar como
gelatina. Además, la vibración se trasladará hacia abajo, a áreas muy
sensibles.
Habría otra posibilidad, cerrando la mano en
forma de puño. Nunca, jamás, pegue a alguien con los puños. Son armas
peligrosas y difíciles de controlar. Pueden ser buenos para boxeo, o para
pelear, pero no pueden ser usados para castigos eróticos.
Como puede ver, no le digo qué hacer, sólo le
doy posibilidades para elegir. Debería probarlas en su sumiso, para saber
qué le gusta más (para azotainas eróticas) y cuales le parecen peores (para
sesiones de castigo). (Ya sé, es una tarea dura. Tendrá que ponerla con las
nalgas para arriba, y darle muchas palmadas, alternando las técnicas para
que pueda comparar. Que se le va a hacer, el deber es primero.)
Las paletas
Y por tales quiero decir cualquier implemento
plano que pueda ser usado para la tarea. Puede ser una paleta real para
castigos, una zapatilla, una regla de 30 o 40 cm., una paleta de ping-pong,
o cualquier otro objeto que le parezca apropiado. Como estará muy cerca del
blanco, debe ser mas bien corto.
Los hay flexibles, como la zapatilla o una
paleta de cuero, o rígidos, como una cuchara o espátula de madera. Las
flexibles arden más, con menos daño posterior, las rígidas causan más dolor
y moretones.
Los lugares para pegar son los mismos para
manos y paletas. No debería necesitar usar todo el brazo para dar un golpe
doloroso. Su antebrazo debería ser suficiente. Y no necesita levantarlo muy
alto, perdiendo precisión. Como con todos los instrumentos de impacto, lo
que necesita es velocidad en la punta que pega, no tanto fuerza. Un buen
“swing” debería lograrlo. Además pegar con fuerza excesiva repercute en todo
el cuerpo, que no es lo que queremos hacer.
Como este artículo trata básicamente de
azotainas sobre las rodillas, no voy a hablar de varas o correas, porque son
difíciles de manejar a corta distancia, y van a dañar mucho más la “mejilla”
lejana que la próxima, lo cual me parece poco serio. De cualquier manera, lo
que sigue se puede aplicar con efectividad a varas o correas si Ud. elige
para la azotaina una de las posiciones con el sujeto inclinado, parado o
acostado.